martes, 22 de abril de 2014

¿Cómo evitar quemaduras en la depilación con láser?

Puede ser que conozcáis algún caso de un paciente que ha ido a algun centro de Depilación a hacerse la depilación láser y que, además de dolerle más de lo normal el tratamiento, se le han producido lesiones post tratamiento en la piel.

La razón básica para entender que esto pueda ocurrir se debe a la legislación sobre las centros de depilación, pues no existe ninguna ley que regule el que sea necesario un título en medicina para encargarse de utilizar dispositivos tan complejos como los de láser. En algunas comunidades como Cataluña se recomienda que sea un médico la persona encargada de su uso, pero en ningún momento se obliga a ello. Un láser no es un juguete que pueda utilizar una persona con cualquier cualificación y desgraciadamente España está llena de centros de depilación cuyos servicios no están controlados de forma médica y sin las garantías de seguridad en el tratamiento necesarias.

¿Qué puede ocurrir cuando un paciente prefiere ahorrar costes y acudir a un centro de depilación láser y no de Depilación Médica Láser?

Pues que se pueden producir negligencias como las que se observan a simple vista en la siguiente imagen, pues no son pocos los casos de personas que han sufrido quemaduras de primer grado en su piel, debido a un exceso de dosis. Los médicos prefieren evitar la palabra quemadura ya que ésta se debe a una energía que se deposita en milisegundos y no a una quemadura tal y como estamos acostumbrados a entenderla.

Pero no solo pueden sufrir negligencias de este tipo sino también negligencia a la hora de consecución de resultados, falta de eficacia y efectos llamado rebote paradójico de no eliminación del pelo sino aumento del mismo en la zona tratada.

El modus operandi de los centros que cometen estas negligencias es echar la culpa al paciente por estar demasiado moreno, pero obviamente pocas veces es culpa de éste. Debería ser siempre un médico la persona encargada de dar el visto bueno en el inicio de este sercicio médico de la aplicación del láser a un paciente, el seguimiento y control del mismo durante todo el tratamiento de depilación láser. Además es quien debe valorar inicialmente, si la tonalidad de la piel es apta para tal tratamiento, los parámetros de intensidad a usar según fototipo, son los adecuados y realizar el seguimiento de la evolución de la piel una vez tratada, para una sesión segura y en consecuencia un tratamiento de Depilación Medica Láser seguro y eficaz y beneficioso.

Mediante el Control Medico Láser continuado en la recurrencia del paciente, se logra reducir al 90% tanto la posibilidad de lesiones post tratamiento como el efecto rebote o falta de eficacia.


Gracias al control Médico y uso de esta tecnología por personal sanitario y cualificado , las clínicas medico estéticas pueden ofrecer un servicio eficaz, seguro y con todas las ventajas al paciente.


En la imagen superior observamos cómo se ha aplicado un mal tratamiento de depilación láser en una sesión; seguramente por falta de control y seguimiento médico. Una negligencia en toda regla y aunque la paciente no sufrirá consecuencias a largo plazo, si molestias tras el tratamiento y los días posteriores hasta la regeneración de las mismas. La piel estará lesionada durante varios meses incluso teniendo marcas al cabo de un año.

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