¡Atención! Desmentimos siete mitos sobre el botox, porque ya es hora

Atrévete con el botox

La palabra botox es, sin lugar a duda, una de las más nombradas por la prensa internacional.

En cuanto una famosa aparece en la alfombra roja con un rostro ligeramente “modificado” (o en algunos casos, radicalmente “modificado”, todo sea dicho), Twitter se dispara, las revistas del corazón dedican diez páginas al posible tratamiento anti-envejecimiento al que susodicha celebridad puede haberse sometido, y los productores de televisión se frotan las manos encantados con el jugo que van a sacarle a esa transformación durante semanas, meses, e incluso años.

Lo cierto es que hay mucho sensacionalismo. Se dice, se critica, se mitifica y se engaña.

Afortunadamente, la confirmación por parte de algunos famosos/as de que recurren al botox con frecuencia, ha ayudado a normalizar la visión que se tiene de los tratamientos anti-envejecimiento.

La australiana Kylie Minogue y la estadounidense Vanessa Williams han hablado, sin ningún tipo de reticencias, del uso de tratamientos de botox para mantener su apariencia juvenil y mantener las arrugas a raya.

El magnate de la música Simon Cowell, también es otro famoso defensor del botox, habiendo llegado a describirlo como algo "tan normal como el usar pasta de dientes”.

A pesar de que estas opiniones han causado un efecto positivo en la percepción que la sociedad tiene del envejecimiento, los mitos y las falacias sobre el botox se mantienen y continúan extendiéndose.

Si llevas tiempo planteándote utilizar botox para rejuvenecer tu rostro, consulta con nuestro equipo experto en medicina estética facial. Ellos te orientarán adecuadamente y verás como la toxina botulínica es adecuada para ti, porque para todos lo es.

Pero, si antes de dar el paso y pedir cita médica gratuita en cualquiera de nuestras clínicas, todavía tienes tus dudas, esperamos poder disiparlas desmintiendo los siete mitos sobre el botox que aún circulan por ahí. 

Aquí los tienes:

Primer Mito Sobre el Botox: El mejor momento para tratarse con botox es cuando ya se tienen arrugas

Los hechos: Lo cierto es que si le sacas ventaja al tiempo, te resultará mucho más fácil evitar la aparición de esas “enemigas a muerte” de las mujeres: las arrugas.

Tal y como explica el Doctor Ochandio, cirujano y médico estético de FC Facial CLINIQUE, "el Botox está siendo utilizado cada vez con mayor frecuencia para tratamientos preventivos. Si esperamos hasta que las arrugas se hayan grabado firmemente en la piel, nos resultará mucho más difícil suavizar su apariencia de nuevo".

El tratamiento con botox se suele utilizar para atenuar las líneas faciales y las arrugas que se han formado por movimientos musculares al fruncir el ceño, entrecerrar los ojos o levantar las cejas.

Si se inicia el tratamiento con botox con finalidades preventivas conseguimos una inestimable ventaja. Piensa que tanto a las personas como a los músculos se les puede entrenar. De esa forma se puede prevenir, incluso evitar, hacer el tipo de gestos y expresiones que contribuyen al empeoramiento de esas arrugas. Eso supone, a medio plazo, que se necesitará menos botox o que se necesitará con menos frecuencia que si no lo tratásemos a tiempo.

Segundo Mito Sobre el Botox: En cuanto dejes de tratarte, las arrugas empeorarán

Los hechos: Nada más lejos de la realidad. En cuanto dejes de tratarte, las arrugas simplemente volverán a ser como eran antes. "El botox evitará que tus arrugas empeoren mientras mantengas al día tus tratamientos. Si decides interrumpirlos, el efecto relajante del botox irá desapareciendo poco a poco, y se reanudará el desarrollo normal de las arrugas como consecuencia del movimiento muscular”, nos explica el Dr. Ochandio. “Es decir, que el botox no empeora las arrugas al contrario, ayuda a evitarlas".

Cabe recordar que los resultados del botox no son permanentes, teniendo una duración de entre cuatro y seis meses en la mayoría de los casos. Para quienes se inyectan a intervalos regulares, los resultados pueden durar un poco más. Dicho esto, una vez que se suspenda el uso de botox, las arrugas volverán a su aspecto inicial previo al tratamiento.

Tercer Mito Sobre el Botox: Es muy doloroso

Los hechos: “La mayoría de nuestras pacientes suele comparar la sensación de las microinyecciones a una picadura de mosquito”, explica el Dr. Ochandio, presidente y fundador de FC Facial CLINIQUE. 

“De hecho, es tan suave que no se requiere el uso de anestesia durante el procedimiento. Se trata simplemente de una aguja muy fina a través de la cual se inyecta el botox en el músculo a tratar, sin causar dolor, tan solo una ligera molestia que, en ocasiones, es prácticamente imperceptible”.

Cuarto Mito del Botox: Es sólo para mujeres

Los hechos: Cada año aumenta el número de hombres que reciben tratamientos de botox y no son únicamente hombres mayores. Hay muchos treintañeros que optan por cuidar su aspecto desde jóvenes y prevenir la aparición prematura de arrugas.

En el caso de los hombres más mayores, muchos de ellos son conscientes de que las arrugas pueden hacerles parecer enfadados, incluso tener una expresión ruda y agresiva. Un tratamiento con botox les suaviza esa apariencia algo desagradable y les da un aspecto mucho más afable, que les puede beneficiar en temas profesionales (y, cómo no, personales, ¡sobre todo los que están solteros y sin compromiso!)

Quinto Mito Sobre el Botox: Es tóxico y peligroso

Los hechos: La tóxica botulínica tipo A que utilizamos en FC Facial CLINIQUE, está aprobada por el Ministerio de Sanidad español para uso médico-estético, por lo que el tratamiento es 100% seguro.

El botox, además, lleva aplicándose hace casi 20 años a una amplia gama de afecciones médicas, habiéndose efectuado unos 16 millones de tratamientos desde que se lanzase por primera vez en el mercado internacional.

Nunca se han encontrado efectos secundarios a largo plazo, incluso en las personas que durante nueve años participaron en un estudio que analizó su evolución al administrarse botox en 30 ocasiones, o incluso un número mayor, durante este periodo.

Sexto Mito Sobre el Botox: El botox se usa sólo para atenuar y borrar las arrugas

Los hechos: El botox no está pensado únicamente para tratamientos estéticos, ¡ni mucho menos! También se utiliza para combatir las migrañas por medio de la reducción de la tensión muscular y del sistema nervioso.

El botox permite bloquear temporalmente las glándulas sudoríparas y detener de esta manera el sudor excesivo. Incluso podría ser útil para los pacientes que sufren depresión.

Séptimo Mito Sobre el Botox: Borrará todas las expresiones de tu cara

Los hechos: El botox relaja los músculos faciales que producen las arrugas en el punto de la aplicación, es decir, los que suelen encontrarse alrededor de líneas y arrugas profundas de la musculatura del tercio superior de la cara.

El botox no afecta a otros músculos que intervienen en las expresiones faciales en general, con lo cual, continuarás pudiendo mostrar una amplia gama de expresiones, sin ningún tipo de dificultad. 

¡Todo lo contrario, lucirás una sonrisa resplandeciente que causará movimientos sísmicos!  

No, bromas aparte.

Esperamos haber desmentido esos rumores infundados que corren por todas partes. Si sigues teniendo dudas, el equipo de FC Facial CLINIQUE estará encantado de disiparlas.

Ponte en contacto con nosotros y… ¡atrévete con el botox!